Nuevo podcast, visión de mercado para 2024
17 de enero de 2024
3 min de lectura
Tras un año 2023 positivo para los mercados financieros, para el año 2024 la situación de partida es algo diferente, con la previsión de un aterrizaje suave de la economía, aunque con unas buenas expectativas principalmente para la renta fija, aunque también para la renta variable.
En este nuevo capítulo del podcast “Gestión de Confianza”, Joaquín García Huerga, Director de Global de Estrategia en BBVA Asset Management, aborda las expectativas sobre los mercados en 2024.
Acceso al podcast: ¿Cómo se comportarán los mercados en 2024?
La moderación del incremento de los precios ha permitido a los bancos centrales frenar las subidas de tipos de interés en el último trimestre de 2023, con posibles bajadas de los mismos en algún momento del año 2024.
Según Joaquín García Huerga, el efecto retardado de la política monetaria y una menor contribución de la política fiscal lo normal es que nos dejen en un entorno de bajo crecimiento en la mayoría de las economías, sin que contemplemos una recesión (menos aun que sea severa) porque no hay graves desequilibrios macroeconómicos. Estados Unidos podría crecer en torno al 1,4%, la eurozona un 0,6% y China un 4,5% y Latinoamérica sobre el 2%.
Tanto en EEUU como en la eurozona lo normal sería que la inflación siga bajando, tanto la inflación general como la subyacente, con algún riesgo que podría darse por el precio de la energia (aunque es poco probable), y con los precios de la alimentación moderándose. La gran incógnita sobre la inflación esta en la fortaleza que llegue a tener el mercado laboral que le puede poner cierto tope a esa caida de la inflación.
Si la inflación se va moderando como esperamos, lo normal es que la Reserva Federal (FED) baje los tipos de interés en 2024, posiblemente durante el primer semestre, en torno a 100 o 150 puntos básicos, dejándolos entre el 4%-4,5%. Lo normal es que, si actúa la FED, el Banco Central Europeo también, a continuación, baje los tipos también durante el primer semestre (posiblemente a partir de primavera) en unos 100 puntos básicos, dejando el tipo de deposito entre el 3% y 3,5%.
En cuanto a los activos más atractivos para invertir en 2024, si a inflación finalmente se controla y los Bancos centrales empiezan a bajar los tipos de interés, será el contexto ideal para la renta fija. Los inversores en renta fija van a disfrutar de altos tipos de interés de emisiones recientes y además de una baja volatilidad (con una muy interesante rentabilidad ajustada a riesgo)
Según el experto de BBVA AM “Consideramos que la renta fija de paises desarrollados es atractiva, pero también la de los paises emergentes, que ofrecen una interesante rentabilidad superior a la de los desarrollados”.
Además, dentro de la renta fija, existen oportunidades en la parte de crédito con investment grade (bonos de alta calidad crediticia), con una muy buena relación rentabilidad-riesgo.
En renta variable, las valoraciones en el conjunto de las bolsas están en niveles adecuados (no están caros), pero desagregando vemos que “el S&P 500 de EEUU está algo alto de valoración, pero no es así en las bolsas europeas y en las bolsas emergentes”.
Los margenes empresariales se están reduciendo, pero BBVA AM considera que esa regresión va a ser bastante suave, porque todavía hay cierta inflación residual que ayuda a las ventas de las empresas y defiende los margenes, y por la flexibilidad de las empresas. Nuestras previsiones son que en EEUU los beneficios empresariales pueden subir un 7%, en Europa un 5% y en España un 2%.
Juntando una valoración con margenes de mejora y unos beneficios de las empresas creciendo, en las bolsas europeas pueden darse rentabilidades que se podrían acercar al doble digito. En Estados Unidos la revalorización dependerá de que los beneficios empresariales vuelvan a crecer, la estimación de revalorización de las bolsas en EEUU pudiera ser algo inferior, pero en la práctica podrían igual a las europeas.
En cuanto a los potenciales riesgos, estaría que el crecimiento del ciclo económico no aguante y llegue una recesión, que la inflación muestre resistencia a la baja y los bancos centrales no puedan bajar tipos de interés. Otro riesgo es el geopolítico (conflictos de Ucrania, Israel-Palestina), pero los mercados históricamente han podido superar estos riesgos.